En pleno corazón del Valle del Guadalhorce se encuentra Coín. Este lugar, presenta una serie de contrastes que genera la mezcla entre las canteras de mármol, dolomita y arena con sus muros y la riqueza vegetal que contiene.

Durante estos días, Coín celebra su segunda feria, en honor la patrona Nuestra Señora de la Fuensanta. La fiesta, que tiene su origen a mediados del S. XVIII, gracias a Carlos III, quien concede en el año 1765 a Coín el privilegio de celebrarla, comienza con la Feria de Día, situada en el centro del pueblo y extendiéndose desde la Alameda al Parque San Agustín, pasando por la Plaza Bermúdez de la Rubia, donde se puede encontrar, a lo largo de todo este paseo, diversidad de tapas, bebidas y el ir y venir de la multitud y algún grupo u orquesta amenizante de la fiesta. Además, contamos con un programa de diferentes actividades, concursos, eventos deportivos y de ocio.

Por la tarde noche, la actividad se traslada al recinto ferial, en el que se celebra la Feria de Noche, en la que las casetas, puestos de feria y atracciones, tanto para niños como mayores. La feria concluye este sábado con la celebración de una misa multitudinaria en la plaza Bermúdez de la Rubia en honor a nuestra patrona que continuará con una procesión nocturna en Honor a su día y a estas fiestas. Damos por finalizadas las fiestas con la tradicional tirada de cohetes.

Un paseo por Coín. Su entramado urbanístico, de la época precristiana, ha dejado una herencia palpable. Si visitas este lugar, no puedes irte sin ver, por ejemplo, la Iglesia de San Andrés. Esta iglesia lleva situada en esta ubicación desde 1520. Su planta está en forma de 'L' (de las que solo hay cuatro en Andalucia) y son elementos a reflejar su portada-espaldaña, del s. XVIII, y su claustro.

Otro lugar que tampoco puedes perderte es el convento de Santa María de la Encarnación. Un convento de estilo mudéjar del siglo XV, de la época de loa Reyes Católicos. Fue construido en el asentamiento de una mezquita árabe. El convento fue, durante muchos años en el pasado, 'Casa del pueblo', lo que le salvó de ser destruido durante a República. Dentro tiene una sala etnográfica y arqueológica.

Museo Etnográfico Las Vistillas. Este complejo cultural contiene un taller de cerámica, un museo etnográfico, un mirador y un huerto. El Taller de cerámica trabaja distintos estilos, tradicionales y modernos, y el uso de algunas herramientas como el torno. Se encuentra dividido en dos salas y los exteriores de la finca. Por medio de tras salas o zonas podemos conocer cómo era la vida de nuestros antepasados en el Valle del Guadalhorce, ya que recurra la historia de Coín durante el siglo XX. Comer pan de La Curruca. Este lugar artesanal aún amasa el pan a mano y lo cocina en horno de leña. Es un manjar para los habitantes de Coín.

Torre del antiguo convento Trinitarias. Enclavada al pie de la calle La Cruz, la excepcionalidad del simbolismo ternario de su singular planta triangular sólo ofrece dos paralelos andaluces: la torre de la iglesia de Santa Ana, en Archidona, y la torre del Convento de Mínimas y Marroquíes de Écija. En el siglo XVI el convento de Nuestra Señora de los Ángeles estaba ubicado en el Partido Los Ángeles, a las afueras de Coín. Este convento fue fundado por la reina Doña Juana en tiempos del ermitaño Fray Juan de Valencia, a partir de una ermita que, tras la conquista cristina, construyeron dos religiosos Trinitarios Descalzos en el Partido Los Ángeles.

El conjunto del convento de trinitarios se concluye a mediados del XVIII, si bien las primeras noticias sobre su fábrica datan de mediados del siglo XVII. Con la llegada de los franciscanos en el siglo XX se destinó su uso a escuela. Más tarde, este imponente edificio fue destruido y, sobre su solar, se construyó una escuela ( actual colegio Ximénez de Guzmán) siendo hoy día, la torre su último vestigio en pie y monumento emblemático de la ciudad.