El Teatro Cervantes de Málaga y su vigésimo novena Temporada Lírica recuperan Così fan tutte, una ópera en la que Mozart y Da Ponte «convierten una historia de intercambio de parejas, fantasía sexual y escuela de amantes en una chispeante e inteligente comedia, espontánea y fresca como un día de verano a orillas del Mediterráneo». Son palabras de Curro Carreres, director de escena, que explica que el montaje ya exhibió en 2010 en estas mismas tablas, pero que se dota «de actualidad en esta sociedad hipertecnificada» en la que las personas y las relaciones «aparecen cosificadas y en la que incluso se habla de amor líquido postmoderno».

Così fan tutte es una historia de apuestas de seducción mediante el equívoco y el disfraz, de fidelidad y engaño, de burladores burlados y de lucha de géneros, un retrato complejo de las relaciones humanas que además está envuelto en una de las partituras más exquisitas que completó el salzburgués.

El director artístico y titular de la Orquesta Filarmónica de Málaga, Manuel Hernández Silva, se ocupará desde el foso de exprimir sus sobresalientes arias y números de conjunto con un plantel de voces jóvenes y experimentadas a los que apoya el Coro de Ópera de Málaga, al que dirige Salvador Vázquez, y los profesores de la OFM. La malagueña Berna Perles como Fiordiligi y el ubetense formado en Málaga Damián del Castillo en el rol de Guglielmo componen la primera pareja de esta fresca comedia. Sus enredos amorosos y los de la pareja simétrica, representada por Carol García (Dorabella) y Pablo García López (Ferrando), están atizados por un cínico e inteligente anciano al que encarna Enric Martínez-Castignani (Don Alfonso) con el apoyo de la cómplice doncella a la que da vida Beatriz Díaz (Despina).

Sus peripecias, quizás las más humanas y profundamente psicológicas de la obra de Mozart, se ambientan en el Nápoles del XVIII en este montaje de Carreres, que además subraya el carácter coral del texto manteniendo a las tres parejas protagonistas en escena constantemente, y que añade nuevos recursos audiovisuales y una renovada iluminación a la versión de 2010.

Si bien Le nozze di Fígaro y Don Giovanni se llevaron los laureles del público y la crítica y Così fan tutte tardó casi dos siglos en ser reconocida, la tercera colaboración entre el libretista Lorenzo Da Ponte y el genio de Salzburgo es una joya tanto en su vertiente musical como en su componente teatral. Y es que en esta pieza marcada por una calculada simetría en la trama, precisa como una partida de ajedrez, se combinan la parodia de los convencionalismos de la ópera seria dieciochesca presentes en el texto de Da Ponte, lleno de cinismo y desencanto, y la honda exploración de los sentimientos humanos que aborda la partitura de Mozart. Y de estos mensajes aparentemente contradictorios surge una obra maestra.

Così fan tutte es la tercera cita de la 29 Temporada Lírica del Teatro Cervantes, que abrió en noviembre de 2017 la puesta en escena de Turandot con dirección musical del maestro Arturo Díez Boscovich y escénica de Emilio López y que prosiguió el pasado sábado 17 de febrero con un recital del tenor Gregory Kunde. El ciclo operístico del coliseo malagueño cuenta con la colaboración del INAEM, Fundación Unicaja (entidad que colabora con el ciclo desde hace 21 ediciones y que este año ha incrementado su aportación económica), Sando y Ópera XXI.