Cayetana de los Heros es una niña de ocho años que acaba de recibir la «peor» noticia de su vida: tendrá un hermano en mayo. Acostumbrada a ser el centro de atención, todo su mundo se viene abajo cuando descubre que tendrá que compartir protagonismo con el nuevo miembro familia. La ópera prima de la cineasta peruana Rosario García-Montero, «Las malas intenciones», fue acogida con gran sorpresa por la crítica y se proyectará mañana en el Festival de Cine de Málaga.

Las malas intenciones es su ópera prima y fue considerada la mejor película peruana de 2011. ¿Podrá superar el listón con sus próximos proyectos?

La verdad es que da un poco de miedo, porque en estos últimos meses no he parado de acudir a festivales y recibir buenas críticas por parte de muchísima gente. La acogida ha sido espectacular y claro que existe un poco de pánico por lo que pueda ocurrir a continuación; supongo que tendré que trabajar muchísimo y en eso estoy. Mi intención ahora es emprender un proyecto en colaboración con España.

Entonces, el Festival de Málaga puede servirle de plataforma para conseguirlo.

Sí, eso espero, tenía muchas ganas de venir y conocer este certamen. Pienso que puede ser una gran oportunidad para conseguir lo que quiero y abrirme un poco más a los productores españoles para crear una gran película, que es ahora mismo donde tengo puesta las miras.

Cayetana, la protagonista de su película, es una niña tímida y con una gran imaginación, ¿qué tiene ella de usted?

Al principio creía que no mucho, no me veía realmente reflejada en ella aunque cuando vi la película en conjunto, me di cuenta de que hay muchas cosas que compartimos. Mi infancia fue diferente pero sí imaginaba y creaba y estaba todo el tiempo dándole a la cabeza.

¿Por qué se fijó en Fátima Buntinx para el papel?

Entrevisté a muchas niñas y no encontraba la adecuada. El guión decía que tenían que ser ocho años y Fátima tenía siete por aquel entonces. Ella era una niña muy tímida, muy solitaria y me llamó la atención, aunque por la edad no podía ser puesto que estaba demasiado chiquita para ese papel. De repente un día me llamó y me dijo: «¿Sabes que acabo de cumplir ocho?» Y así fue.

El personaje es entrañable y termina por acaparar toda la película, ¿es muy complicado trabajar con niños de esa edad?

No demasiado, las niñas rápidamente se hicieron amiguitas entre ellas y eso nos facilitaba mucho el trabajo. La verdad es que Fátima hizo un trabajo sensacional, ella está abrumada por todo el protagonismo que ha tenido. Hay gente que ha llegado a decirme que Cayetana de los Heros es un personaje eterno, de los que jamás se olvidan y eso me gustó muchísimo.

¿En qué momento se encuentra el cine peruano?

La verdad es que se están haciendo cosas interesantísimas, muchas de ellas de coproducción española. Yo creo que después de La teta asustada y Octubre se marcó un antes y un después para el cine peruano. En mi opinión, Claudia Llosa ha hecho muchísimo por llevar nuestro cine más allá de Latinoamérica. Es curioso pero la mayoría del cine peruano actual está hecho por mujeres.

¿Casualidad?

No creo que dependa de nada en concreto. Sólo hemos coincidido un grupo de mujeres con ganas de trabajar mucho.