Anticancerígenas, antioxidantes, llenas de vitaminas D... comer setas está de moda y su recogida, también. En Cortes de la Frontera, la micología es una tradición. La celebración de sus jornadas se ha convertido ya en uno de los eventos más esperados por los vecinos.

No son los únicos que esperan este fin de semana con impaciencia, también los 200 asistentes que desde esta tarde hasta el próximo domingo participarán en este evento. El perfil es muy variado, «hay gente que repite y son expertos en la materia, y otros que vienen por primera vez», explica Isabel Casillas, bióloga y vicepresidenta de la asociación organizadora. Pero, sobre todo, hay familias con hijos que ven en el micoturismo una oportunidad para conocer y disfrutar del Parque Natural de los Alcornocales.

Pese a la escasez de hongos, por la falta de lluvias, esperan repetir «e incluso mejorar el éxito de años anteriores». La inauguración será a las 18 horas y dará pie a diferentes ponencias de iniciación a la micología y prácticas para la recolección.

El momento más esperado llegará mañana cuando los participantes salgan al monte para buscar setas. Níscalos, boletus o yemas de huevo son las setas comestibles más demandadas. Tras la recogida, se celebrará un taller de clasificación de setas y otras actividades.

El programa del domingo será más relajado: un show cooking y la posterior degustación ocuparán gran parte del día, aunque también se podrá asistir a una conferencia sobre intoxicaciones o a un micodesfile, para los más pequeños.

La amplia variedad de recetas que permiten en la cocina hacen de las setas el producto estrella de muchos platos locales. Por eso, este fin de semana, se realizará la quinta Ruta del Picoteo, donde se podrán degustar exquisiteces en nueve bares del pueblo. Además, habrá otras muchas otras actividades como una exposición fotográfica temática y un mercado artesanal.