¿Ya has pensado qué vas a hacer en Semana Santa? Tanto si decides hacer las maletas e irte de viaje como si optas por quedarte en tu ciudad, durante estos días festivos se abre un abanico de posibilidades que impedirán que te quedes en casa con la sensación de que no has aprovechado el tiempo. A continuación, te proponemos algunas escapadas:

Visita rápida al país vecino

Para quienes quieran visitar alguna ciudad fuera de España, y no dispongan de muchos días, Portugal siempre es una buena opción. Lisboa es una de las ciudades más carismáticas de toda Europa, con una enorme riqueza histórica y cultural que se combina con una animada vida nocturna, unos precios mucho más asequibles a la

media europea y un clima agradable todo el año. En la capital se puede disfrutar de edificios y lugares como la emblemática Torre de Belém, el ambiente bohemio del Chiado y del Barrio Alto o el espectacular Monasterio de los Jerónimos.

Otra opción en Portugal la encontrarás en la desembocadura del Duero. Oporto es una ciudad en pleno auge en cuanto a turismo cuyo barrio más antiguo y emblemático es el distrito de la Ribeira, repleto de callejuelas estrechas donde se puede respirar un aire nostálgico y disfrutar de su animada vida social entre una gran cantidad de bares y terrazas.

En Oporto, además, tendrás la oportunidad de encontrar productos típicos en el conocido 'Mercado do Bolhao', así como disfrutar de restaurantes con platos típicos de la región como el bacalao o las 'francesinhas' y beber algunos de los mejores vinos del 'alto Douro', como 'el Tawny' o 'el Ruby', mediante visitas guiadas a las bodegas más importantes.

El mejor destino playero para todos los europeos

Los griegos las llamaban las Islas Afortunadas. Obviamente estamos hablando de las Islas Canarias, donde hasta en el mes de marzo, y sin necesidad de viajar hasta el Caribe, podrás disfrutar de playas increíbles. Distribuidas por todo el archipiélago, en Las Canarias hay playas para todos los gustos y preferencias, como 'el Charco Azul', en El Hierro, donde disfrutarás de unas espectaculares piscinas naturales en un paisaje paradisíaco y natural; la de 'Las Canteras', una de las mejores playas urbanas de España y un emblema de la ciudad de Las Palmas, que combina cualidades naturales increíbles para el surf y el snorkel con unos geniales servicios e instalaciones públicas; o la 'Playa del Papagayo', en Lanzarote, una bahía con un paisaje rocoso donde, mientras te bañas en sus aguas de color esmeralda, podrás ver la isla vecina, Fuerteventura.

Escapada rural en la comunidad de Madrid

Si vives en Madrid y optas por no viajar en Semana Santa, no descartes la opción de disfrutar de la naturaleza, ya que a unos kilómetros del agobio de la capital tienes el 'Hayedo de Montejo', ubicado en el municipio de Montejo de la Sierra, en la parte norte de la frontera entre la Comunidad de Madrid y Guadalajara.

Con una extensión de 250 hectáreas, es el único lugar declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco en toda la Comunidad, y uno de los hayedos más meridionales de Europa. Entre sus hayas de más de 20 metros de altura, podrás observar otros muchos tipos de árboles silvestres como robles, cerezos, abedules o

acebos. En total se estiman unas 833 especies de flora y 194 de animales vertebrados. Además, este ambiente rural mejora gracias al río Jarama, que discurre a través de todo el hayedo.

Semana Santa en Hungría

Europa del Este es siempre una sorpresa para todo el que se lanza a visitarla. Especialmente Budapest, que es uno de los destinos ideales al ser una de las pocas ciudades europeas donde cada día de visita no te cuesta un verdadero dineral. Los vuelos son asombrosamente económicos en relación a la distancia desde nuestro país y los alojamientos son de lo más barato que hay en Europa.

Además, la capital magiar es conocida por sus balnearios, únicos en el mundo; así como por los famosos 'bares-ruina', por su gran vida nocturna y por un enorme número de monumentos y lugares históricos con mucho interés cultural, como el Castillo de Buda, el Parlamento, la Ópera Nacional o los Puentes del Danubio.

Además, a un centenar de kilómetros de la capital encontrarás el que se considera el pueblo más bonito de Hungría, Hollókö, donde, en Semana Santa, se celebra una fiesta para quien quiera conocer las tradiciones húngaras.