Ni una cosa ni la otra. Y me haríais feliz, muy feliz. Ni me lo digas, ni me lo cantes. No teníamos bastante y parieron las abuelas del universo mundo. Telecinco, que machaca con saña todo lo que tenga que ver con la música, ha decidido subirse al tren de 'Tu cara me suena', o 'Tu cara no me suena todavía', le ha puesto unas gotas de pimienta con letras de 'crítica social' -hay que tener el hígado de hormigón para meterse en la boca algo tan inteligente-, ha disfrazado a los concursantes como se caracteriza en Antena 3 a los que participan en su formato de imitadores, ha armado un jurado con Jorge Cadaval, Yolanda Ramos, el inevitable Santi Millán, y la estilista Cristina Rodríguez, y como estas cosas tienen que tener su presentador y todo, y Jesús Vázquez estaba sin destino después de 'La voz', pues hala, a presentar 'Me lo dices o me lo cantas'.

Un ejército de caras más o menos conocidas, casi todas en la órbita de Mediaset, unas salidas de una cloaca y otras de otra, son los 12 concursantes que cada semana aspiran a ganar la noche cantando, imitando, criticando, y siendo los más divertidos de la clase. ¿Recuerdan a 'La parodia nacional'? Pues eso. Fue un programa, también emitido por Antena 3, en el siglo pasado, de 1993 a 1996 donde Constantino Romero presentaba las galas basadas en canciones populares a las que se les cambiaba la letra para tratar temas de actualidad. En 'Me lo dices o me lo cantas', así lo llama Telecinco, echan mano de famosos como Rebeca, Ken Appledorn, o David Carrillo, y de anónimos como… ¿Perdón? Si los mentados son famosos qué son los anónimos. En fin, tele del siglo XX con algarabía del XXI. Servidor los prefiere como Neruda, calladitos. Y ausentes.