Mitad del mundo, el segundo montaje dirigido por Fran Perea para Factoría Echegaray, se estrenó el pasado miércoles en medio de una notable expectación. Recordemos que la primera obra levantada por el actor y cantante malagueño para el vivero escénico de los teatros municipales, Souvenir, fue un gran éxito de crítica y público que fue exportado a otras provincias. De nuevo amparado en un texto del dramaturgo malagueño Pablo Díaz Morilla, Perea nos trae a Christopher Reeve, el auténtico Superman, intentando mediar en Santiago de Chile, en plena dictadura de Pinochet, por la liberación de 77 actores y actrices.
El director construye la dramaturgia compaginando planos oníricos y de áspera y a la vez agridulce realidad, y jugando con las canciones tañidas y cantadas por Ana Loig, entre las que se cuelan versos y melodías de Víctor Jara, de Bob Dylan o incluso de Bach. Envuelta en una escenografía blanca, la pieza «nos interpela, nos anima a que formemos parte, junto a sus personajes, de un juicio a nosotros mismos», y lo hace con «la palabra como protagonista», destaca Perea. Palabras firmadas por cantautores, palabras ideadas, palabras evocadas y algunas muy significativas como Piedad, el nombre propio de la pianista ecuatoriana amante de Pinochet.
Factoría Echegaray produce esta segunda aventura conjunta entre el dramaturgo y el director, que ya facturaron un premiadísimo espectáculo con Souvenir, una pieza también montada por la incubadora escénica municipal.
Además de la sociedad Perea-Díaz Morilla, figura en el equipo artístico el grueso de los profesionales que hicieron crecer Souvenir: Michael Collis ilumina la obra, Tatiana de Sarabia está diseñando el vestuario, la escenografía y las videocreaciones son de Dita Segura y Juliana Gemma, la peluquera y maquilladora Katy Navarro se encarga de transformar a Márquez en Reeve, caracolillo incluido, y a Guardiola en el maléfico general chileno de gafas tintadas, y Rocío Vidal ayuda a montar el rompecabezas como ayudante de dirección. La música original y el espacio sonoro están firmados por Perea y Ana Loig, y a cargo de la coordinación técnica estará Pablo Lomba. Junto a todos ellos, trabaja en el montaje el equipo técnico habitual de Factoría Echegaray.
Al igual que sucedió con Souvenir, cuyo texto llegó a Factoría Echegaray con premios bajo el brazo antes de estrenarse, Mitad del mundo ya cuenta con un importante reconocimiento previo. El malagueño Pablo Díaz Morilla recogió el pasado 3 de noviembre el premio del VI Certamen Jesús Campos para Textos Teatrales en el marco del Salón Internacional del Libro Teatral en el Centro Dramático Nacional.
