El Centre Pompidou Málaga acogerá este sábado 1 de junio, de 20.00 a 00.00 horas, La Noche en Danza #2. Inspirada en la exposición semipermanente 'Utopías modernas', y dentro del ciclo temático 'Utopías personales', las intervenciones artísticas programadas tratarán de acercarse y cuestionarse los procesos de construcción de una identidad ajena a los parámetros socialmente establecidos.

La Noche en Danza es un evento trimestral del Centre Pompidou Málaga que invita al público a descubrir este espacio de una manera diferente, a través del desarrollo de una o varias piezas de artes vivas inspiradas en las exposiciones y apoyadas por una serie de visitas específicas, debates o proyecciones, han precisado desde el Ayuntamiento en un comunicado.

'Identidades líquidas' es el título de esta edición de La Noche en Danza que contará con la 'performance' ART NOW creada por Verónica Ruth Frías y la pieza coreográfica 'One, One, One' de la compañía Ioannis Mandafounis. Además, se han organizado visitas crono en torno a la exposición semipermanente y también se podrá disfrutar de la sesión de música del DJ John Hurt en el bar efímero.

Siempre en torno a la exposición 'Utopías modernas', esta segunda Noche en Danza de 2019 incide en el lado más personal de las utopías. En la 'performance' un grupo de mujeres del sector de la cultura de Málaga, vinculadas a las artes plásticas y visuales y seleccionadas, procurando la máxima diversidad profesional y de edad, lleva a cabo una acción en los espacios expositivos.

Alicia Gutiérrez Mármol, Lola Guerrera, Clotilde Lechuga, Victoria Abón, Mariana Martín, Cristina Savage, Ana Iglesias, Patricia Espejo y Ángeles Ramos junto a Verónica Ruth Frías genera su propia pila de libros, vinculados estos con la actividad profesional que desarrollan y en la que, posteriormente, cada una de las mujeres se subirá e intentará mantener en equilibrio.

Por su parte, Ioannis Mandafounis propone con 'One One One' romper con la relación que se establece entre la artista y el público que acude al teatro. Para ello, las bailarinas Manon Parent y Anastasia Ivanova se involucran física y mentalmente en una acción que desvirtúa la apariencia de lo real, propiciando la exploración de sus límites y su relación con la transgresión, tratando de incomodar en cierta forma a los espectadores que se reúnan ante ellas o estén próximos a las bailarinas. La danza intentará captar las emociones del público, con la adopción de identidades pasajeras, a través de la realización de movimientos y gestos.