El Museo Interactivo de la Música de Málaga recoge hasta el 12 de abril de 2020 la exposición temporal 'Silbatos aztecas de la muerte'. En esta muestra, inagurada por Noelia Losada, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, y el director del museo, Miguel Ángel Piédrola, se exhiben un conjunto de instrumentos de la cultura Mesoamericana precolombina usados en sacrificios y batallas, junto con un panel de audio y una sala de inmersión audiovisual.

Los denominados silbatos de la muerte aztecas han estado en silencio casi 500 años, hasta su reaparición a mediados del siglo XX. Fue en 1999, con el hallazgo de los restos de un hombre joven sacrificado en el yacimiento arqueológico de Tlatelolco, en Ciudad de México, cuando comenzó el resurgir de la leyenda de estos instrumentos. Además, la aparición de los silbatos está vinculada con el dios azteca del viento, Ehéctatl. Este dios era considerado un héroe poderoso, cuyo aliento iniciaba el movimiento del sol y frenaba la lluvia.

En 'Silbatos aztecas de la muerte', el visitante va a descubrir en el MIMMA reproducciones originales de estos curiosos instrumentos de cerámica dotados de una belleza grotesca y un ingenioso mecanismo acústico. El diseño de la boquilla, que carece de utilidad sonora, permite utilizarlos mientras se empuña un arma o se golpea un tambor. En el panel de audio, se pueden escuchar todos los sonidos de las piezas, tanto en solitario como combinados.

Sin importar si tienen cabeza de hombre, de mono o de monstruo, todos poseen una forma de paralelepípedo, con una ranura en uno de los cantos y perforaciones en ambas caras que forman algo conocido como "cámara de caos", una especie de resorte de aire que brindaba máxima potencia al sonido.

'Silbatos aztecas de la muerte' es la primera exposición programada en el nuevo proyecto Expolab del MIMMA. Con esta iniciativa, el museo malagueño pretende lanzar propuestas expositivas en pequeño formato, que sirvan de modelo a exposiciones de mayor tamaño y entidad.