El intento no es reprobable, el de humanizar a uno de los personajes de esta saga basada en los célebres juguetes de HESBRO y podía haber dado mucho más de sí, pero el tratamiento del guión, repleto de tópicos a la hora de mostrar los diálogos de los invasores del planeta y los que tienen lugar con sus padres en la casa de la protagonista, impiden que adquiera un mínimo de convicción. Por eso esta primera película de ficción de Trevis Knight, que solo había dirigido un largometraje de animación, 'Kubo y las dos cuerdas mágicas', representa una casi total decepción y podría ser el título más endeble de la saga. Desde luego las anteriores entregas, sin ser nada del otro jueves, ofrecían lo que adelantaban con un soporte técnico espectacular y aquí ese aspecto acaba agobiando por la reiteración de las escenas de acción y por la falta de un esquema de trabajo coherente con este apartado.

La cinta parte de una base muy frágil, que salta ya a la vista en las secuencias del comienzo, cuando un destacamento militar que está haciendo prácticas ven interrumpidas las mismas al impactar con ellos una especie de meteoritos incandescentes. Es el año 1987 y ya se hace evidente que hay otras civilizaciones en el espacio que conocen la Tierra y que, además, la han elegido como lugar en el que abastecerse en una casi segura contienda espacial. Se trata de algo menos de media hora reglamentaria para empezar con un golpe de efecto, pero que no consigue ese propósito. Se abre entonces una vía a la esperanza al aparecer Charlies, es decir Hailee Steinfeld, una chica que está a punto de cumplir los 18 y que está harta de soportar los discursos bienintencionados pero obsoletos de sus padres y que no ha encajado con el nuevo marido de su madre. Será así como se encuentra con Bumblebbee, nada menos que el mítico VW escarabajo, que parecía retirado por completo de servicio pero que milagrosamente vuelve a las andadas. Ofrecía además una inmejorable oferta, puesto que la actriz encargada de interpretar a Charlie no era otra que la citada Steinfeld, que fue nominada al Óscar por su primera película, aunque ni siquiera esos recursos cambian la suerte de la cinta.