El diván de 'Viva la vida' es el lugar por el que distintas personalidades de la televisión pasan para mostrarse con total sinceridad y sin filtros ante los temas más cuestionados de su persona. La última en sentarse ha sido Aramís Fuster, cuya vida no ha sido un camino de rosas.

La conversación con la psicóloga ha comenzado con la dura infancia de la vidente. "Con dos años mi padre y su familia me raptaron y me tuvieron separada de mi mamá cuatro años", ha relatado, asegurando que había sufrido brutales palizas durante ese tiempo.

En un momento de su vida, a Aramís le tocó hacerse cargo de su madre enferma. "Si por entonces alguien me hubiera preguntado a quién quería más, si a mis hijos o a mi madre, a mi madre siempre", ha confesado la máxima autoridad en ocultismo, abriendo la brecha de sus hijos, polémica que durante tanto tiempo le ha rodeado.

Desnudándose emocionalmente, la vidente ha sentenciado que se cansó de ser su madre porque "no sabían ser mis hijos, mientras les iba soltando el dinero si". "Lo único que han hecho ha sido echar porquería sobre mí", añadía en una actitud sincera. Pero lo más chocante de la tarde fue cuando Aramís confesó lo siguiente: "Mis hijos los tuve yo porque quise tenerlos y me he arrepentido mil veces".

Pese a ello, la exconcursante de 'GH VIP' ha asegurado que no cambiaría nada de la crianza de sus hijos, salvo darles todo lo que pedían: "Probablemente no estaban preparados para tener una madre tan famosa y tan cuestionada". Aramís ha reconocido también que ya es tarde para reconciliarse con ellos y ha sentenciado: "Si ellos son felices sin mí, ¿qué más felicidad quiero?".